¿Cuántos envases de plástico utilizas en tu día a día? ¿Y cuáles de ellos son reciclables? En este artículo descubrimos qué plásticos se pueden reciclar y cuáles no. A continuación, aprende a diferenciarlos y aporta tu granito de arena a la sostenibilidad.
Desde una mayor conservación de alimentos que permite alargar su vida útil y reducir el desperdicio, hasta la fabricación de piezas clave para el sector de la industria, el plástico ha aportado múltiples soluciones para facilitarnos el día a día. No obstante, muchos de estos plásticos solo pueden ser utilizados una única vez, sin posibilidad de reciclarse. Este hecho puede provocar un gran impacto a nivel medioambiental, por lo que la concienciación y la información sobre cuáles son los plásticos que se pueden reciclar es clave para alcanzar un modelo más circular que tenga como pilar la sostenibilidad.
¿Se pueden reciclar todos los plásticos?
A la hora de saber cuáles son los plásticos que se pueden reciclar, es importante recordar que existen diferentes tipos de plástico. La mayoría de ellos están elaborados a partir de compuestos derivados del petróleo, el gas natural o el carbón. Para catalogarlos, la Society for Plastic Industry creó en 1988 un sistema con el que poder diferenciarlos:
Este sistema distingue siete tipos de plásticos con el objetivo de saber dividirlos mejor para su posterior reciclaje. El sistema los clasifica según su fabricación y el tipo de polímero usado en ese envase o producto.
Mientras que para el consumidor final el proceso de reciclaje es mucho más sencillo, ya que tan solo es necesario que introduzca el plástico en el contenedor amarillo, en la planta de selección el procedimiento de clasificación es más complejo. Una vez seleccionado en función del tipo de plástico que sea, los envases reciclables se trituran y se lavan en la planta de cada reciclador antes de volver a formarse como un nuevo envase.
Por suerte, a día de hoy, los consumidores están cada vez más concienciados con su papel en esta cadena. Así mismo, desde las administraciones se están impulsando proyectos con el objetivo de aumentar las tasas de reciclaje, creando incluso concursos para ver cuál es el municipio que más recicla.
Plásticos que se pueden reciclar
Entre los mayores representantes de los plásticos que se pueden reciclar podemos encontrar los siguientes tipos:
Polietileno Tereftalato, clave en la industria de la alimentación
También conocido como PET, es un polímero plástico con el que se pueden fabricar distintos tipos de envase mediante procesos como la extrusión o el termoformado. Es uno de los tipos de plástico más resistentes del mercado, así como uno de los termoplásticos más rígidos. Estas características, junto con la de ser un material transparente, hacen que habitualmente se use en la elaboración de bandejas de alimentos o en envases para bebidas, entre otros usos.
Además, al ser 100% reciclable para uso alimentario, su uso favorece la economía circular en la industria alimentaria.
Polietileno de alta densidad o PEAD
Es un polímero termoplástico con una rigidez y resistencia notables. Este material es capaz de resistir a los impactos a las altas temperaturas, a la acción de disolventes e incluso a productos corrosivos, lo que hace que sea uno de los materiales más demandados del mercado. Suele emplearse en la elaboración de botellas rígidas para productos de limpieza, entre otros.
PEBD, el hermano de menor densidad del PEAD
Sus siglas significan polietileno de baja densidad y se diferencia del PEAD en que tiene una densidad molecular menor. Dicha densidad consigue que este material sea muy flexible, sin perder cualidades como la resistencia a los impactos y a sustancias químicas. Todo esto lo convierte en un candidato ideal para elaborar film trasparente, siendo además utilizado para fabricar, por ejemplo, bolsas de basura tras el proceso de reciclaje.
Además, el PEBD se diferencia también del polietileno de alta densidad en la cantidad de plástico usado en el envase: con el PEBD se usa una cantidad mucho menor.
Polipropileno o PP, uno de los mejores plásticos que se pueden reciclar
El PP es quizá uno de los tipos de plástico que más versátil resulta respecto a su uso. Es fácil de moldear y de colorear, presentando una gran resistencia frente a la flexión, la fatiga y hacia los productos químicos. Sus características hacen que sea habitual verlo como el material empleado en la elaboración de los botes de salsa, de los tapones de botella y de envases médicos o veterinarios. Tras el proceso de reciclaje, con él se pueden fabricar cepillos, bandejas o cables de batería, entre otros.
La apuesta de SP Group por la sostenibilidad
En SP Group creemos que es posible alcanzar la sostenibilidad y una economía circular a través de la elaboración de un packaging más respetuoso con el medio ambiente. Apostamos por el reciclaje y por un continuo proceso de innovación que nos lleve a formular nuevos materiales con un menor impacto medioambiental.
Es por ello que trabajamos día a día para incorporar materiales reciclados y hacerlos reciclables. El resultado: plásticos más sostenibles como rPET y monomateriales reciclables como PE ECO, PE HB ECO o PP HB ECO.
Así mismo, hemos optimizado nuestros procesos de fabricación para reducir el desperdicio de materiales y poder reutilizarlos durante el proceso. Nuestro objetivo es elaborar envases sostenibles que cumplan con los más altos estándares de calidad. Si quieres saber más sobre nuestro compromiso con la sostenibilidad, visita nuestra web.