Existen muchas formas de lograr que un producto destaque frente a la competencia en las estanterías de los supermercados. Aunque en un primer momento pensemos en aspectos tales como la colocación del envase en el líneal, la estética del packaging o los facings, lo cierto es que podemos ir un paso más allá para atraer la atención de los consumidores, como es el caso del uso de envases sostenibles.
Una tendencia cada vez mayor entre los compradores es la preferencia por productos de temporada o ecológicos por ser más respetuosos con el medio ambiente o más sostenibles. Sin embargo, para que estos sean realmente sostenibles, requieren que sus envases también lo sean.
La importancia de los envases sostenibles
A la hora de ilustrar la importancia que tiene la sostenibilidad para los consumidores, no hay más que observar las últimas encuestas elaboradas por consultoras independientes. Los datos que arrojan estas encuestas destacan que 2 de cada 3 consumidores consideran como un factor muy importante el hecho de que las empresas de alimentación trabajen con políticas sostenibles. Dentro de dichas políticas de sostenibilidad, los envases juegan un papel clave: y es que los consumidores destacan en este tipo de encuestas que los envases deberían ser respetuosos con el medio ambiente y poder reciclarse, reutilizarse, o estar elaborados con materiales reciclados.
Así mismo, estos no son los únicos datos que muestran el fuerte apoyo que tienen los consumidores hacia los envases sostenibles. Otras fuentes del sector destacan que el 87% de las compras en los supermercados están condicionadas por los envases, así como que el 71% de los compradores valora de manera más positiva los envases sostenibles. A la vista de estos datos, apostar por envases más sostenibles no solo resultaría beneficioso a corto y medio plazo a nivel medioambiental, sino que también lograría reforzar la imagen de marca y aumentar las ventas.
Ecodiseño y packaging monomaterial, una nueva forma de alcanzar la sostenibilidad
Podemos encontrar varias formas de satisfacer la creciente demanda de envases sostenibles. La principal tendencia en este ámbito es emplear materiales reciclables o que estén elaborados con materiales reciclados. Para ello, se puede recurrir desde el ecodiseño al uso de monomateriales para la fabricación de los envases.
Respecto al ecodiseño tiene por objetivo principal reducir el impacto medioambiental que generará un envase desde el mismo momento en que se diseña. Para ello, el ecodiseño hace uso de técnicas tales como reducir el peso del envase, diseñar su forma para que sea más eficiente a lo largo de la cadena de distribución o usar materiales reciclables o reciclados. A este objetivo se sumarán las características que ya eran necesarias con anterioridad, como resultar atractivo a los clientes en la estantería del supermercado o mantener el producto en condiciones óptimas.
Otra solución respecto al reto de lograr envases más sostenibles es la fabricación del packaging mediante monomateriales. Este tipo de elaboración implica el uso de un solo polímero que no requiera una separación de componentes previo al proceso de reciclaje, lo que supone un aumento considerable de la reciclabilidad del envase. Una de las ventajas del uso de monomateriales es que no se limitan a una industria o producto concreto, sino que se pueden emplear en múltiples industrias como la alimentaria o la cosmética. Además, su proceso de fabricación requiere un menor consumo de energía y recursos, simplificando el proceso productivo.
Algunos ejemplos de estas soluciones monomateriales serían el PE HB ECO, PP HB ECO, PP HB ECOTOP, rPET o el RST B ECO, entre otros.
La personalización, el elemento para completar los envases sostenibles
Por último, la imagen y el aspecto del packaging son otros elementos que se deben tener en cuenta. Estos elementos, no solo no están reñidos con la sostenibilidad, sino que deben combinarse. Como hemos visto, saber trasmitir la sostenibilidad de la marca será un aspecto imprescindible a la hora de llamar la atención de los posibles compradores.
De nada servirá que nos centremos en crear soluciones innovadoras a nivel de sostenibilidad si no le aportamos esa información al cliente final. Para ello, los envases deben aportar un mínimo de información: por ejemplo, destacar si estamos ante un producto reciclado o si el envase es reciclable.
Una buena opción si se busca mostrar el compromiso de la empresa con la sostenibilidad sin prescindir de un buen apartado estético, sería el uso de códigos QR. De esta manera, aportaríamos la información básica en materia de sostenibilidad, sin alterar la estética del envase en gran medida. Además, también podría ser una forma excelente de enlazar con la política medioambiental de la empresa.
En este sentido, existen muchas formas creativas de mostrar a los consumidores el compromiso a nivel de sostenibilidad que tiene la empresa, siendo importante que dicho compromiso figure en el envase. Es el caso de las marcas que optan por incluir sellos donde se especifica el porcentaje de reciclabilidad, reciclado o reducción de espesor o información sobre cómo reciclar ese envase: a qué contenedor tirarlo, si es necesario separar los materiales o información similar.