Un buen envase es aquel que satisface las necesidades funcionales del producto y, además, consigue llamar la atención del consumidor e influir en su decisión de compra. En SP Group ya te hemos hablado de cómo conseguir una buena experiencia de uso a través del packaging, sin embargo, hoy nos trasladamos al punto de vista de las marcas, y en su necesidad de darle valor al packaging como visión de negocio.
Evolución de los envases para alimentos
Hace muchos años que el vendedor era el encargado de introducir la mayor parte de los alimentos en un envase para entregárselo al comprador. Sin embargo, la evolución tecnológica y la aparición de otro tipo de establecimientos como grandes superficies y supermercados, permitieron presentar los productos ya envasados, con el primer objetivo de protegerlos contra daños externos en su transporte, almacenamiento y exposición al público.
Sin embargo, el packaging evolucionó tanto, que James Pilditch le atribuyó en 1968 al envase el concepto de vendedor silencioso en un libro que hoy en día todavía es referencia en la industria. Esto quiere decir que es el propio envase el encargado de venderse por sí mismo, convirtiéndose así en un elemento decisivo a la hora de la compra.
La idea de presentar un alimento de forma atractiva se consideraba innecesaria hasta la llegada de la era industrial y de la comunicación, y es que el consumidor pasó de preocuparse solo por sobrevivir a poder disfrutar de una mayor variedad de productos. Es aquí cuando se comenzó a utilizar la customización de los productos con fines comerciales.
Packaging hoy: cómo facilitar a las marcas la comercialización de sus productos
La consideración hoy en día del packaging como visión de negocio es indudable, y es que un buen envase facilita a las marcas la labor de comercializar sus productos, convirtiéndose en un elemento de reclamo en el que poder resaltar un mensaje o aportar información útil sobre el producto que venden.
Pero ¿cómo conseguir vender a través de packaging? Estas son algunas de las claves:
1. Mejorar el diseño de los envases
La forma, los materiales utilizados, sus colores e incluso su la forma de uso de los envases influyen en la decisión de compra. En este sentido, el diseño se convierte en un medio de difusión del mensaje de la marca que aporta sentido de calidad, y que persigue ser un reclamo para hacer al producto atractivo y único. De hecho, si quieres lanzar un nuevo envase al mercado, el diseño es uno de los puntos clave a tener en cuenta.
2. Aportar un valor añadido con la innovación
Además de buen diseño, la innovación también juega un papel fundamental con el desarrollo de nuevas tecnologías aplicadas a los envases. En este sentido los envases innovadores que mejoran la experiencia de uso como por ejemplo los envases doypack o formatos stand-up individuales que son fáciles de transportar, almacenar, abrir e incluso reutilizar, son hoy en día unos de los más demandados. O sistemas como el desarrollado por SP Group, válvula VSteam, que hace posible el cocinado y el consumo en un mismo envase.
3. Despertar los sentidos del consumidor
Para considerar los envases como elemento de marketing es necesario también despertar los sentidos del consumidor. Y es que según diversos estudios, el 95% del proceso de decisión sobre un producto es subconsciente, lo que provoca que las marcas se interesen por descubrir cuáles son los deseos y ambiciones del consumidor. Aquí es donde interviene el neuromárketing, que puede dar las claves para diseñar el packaging de los productos de un modo más eficiente.
En definitiva podemos decir que el packaging como visión de negocio persigue captar la atención del consumidor a través de un envase seductor y funcional. Y de hecho, la mayoría de las compañías alimentarias consideran a este segmento como una inversión estratégica para garantizar el éxito de la organización.
Mensajes atractivos en los envases
El consumidor de hoy en día busca un envase que le permita identificar y reconocer el producto que está buscando en el menor tiempo posible, y es aquí donde el envase le confiere un carácter diferenciador a la marca. A través de los mensajes atractivos en los envases, no solo puede quedar durante más tiempo en la mente del consumidor, sino que puede contribuir a su fidelización.
Además, la fabricación de envases cada vez más inteligentes hace que las nuevas tecnologías puedan aplicarse a productos como los envases alimentarios, aportando cualquier tipo de información útil sobre el procesamiento, calidad o almacenamiento de los productos.
Lo que está claro es que la forma de envasar un producto es fundamental para atraer la atención del consumidor, y por ello las marcas invierten en I+D+i para buscar nuevas paletas de colores, diseños, materiales y formatos de envases que resulten llamativos para el público. En definitiva, considerar al packaging como visión de negocio, porque de ello dependerá en gran parte el éxito de su producto.
En SP Group contamos con soluciones de envasado que se adaptan a cualquier necesidad de packaging. Si quieres más información, contacta con nosotros, ¡te mostraremos todo lo que podemos hacer por tu producto!