La existencia de una gran diversidad de materiales plásticos y de sus posibilidades de reciclaje motivó la creación de unos códigos de identificación, cuyo símbolo original data de 1970. Este, de hecho, fue creado por un grupo de estudiantes que participaban en un concurso de la Container Corporation of America para celebrar el primer día de la tierra, habiendo sido elegido entre varios diseños. El símbolo refleja cada uno de los pasos del reciclaje: recogida de materiales, proceso de reciclado y compra de dichos productos ya reciclados. No obstante, los códigos de identificación para plástico llegaron años después de manos de la Sociedad Estadounidense de la Industria del Plástico. Estos nacieron en 1988 con el objetivo de facilitar la identificación de cada uno de los diferentes tipos de plástico y poder separarlos para su posterior reciclaje.
Para lograr dicha clasificación, se emplea un triángulo con tres flechas sucesivas rodeando un número del 1 al 7, conocido como triángulo de Möbius, símbolo universal del reciclaje, simboliza e identifica el material con el que está elaborado el envase así como la posibilidad de ser reciclado para nuevos productos. Conozcámoslos uno a uno.
¿Por qué son importantes los códigos de identificación para plástico?
Los códigos de identificación para plástico se encargan de clasificar los materiales plásticos en función de su composición y características concretas. Como veremos a continuación, existe una gran variedad de tipos de plásticos, y además de resultar idóneos para la creación de un producto u otro en función de sus características, estas también hacen que deban ser reciclados por separado e incluso siguiendo métodos diferentes.
Es decir, no podemos reciclar un plástico clasificado con el número 1 (polietileno tereftalato), con otro que tenga clasificación número 3 (vinílicos o cloruro de polivinilo), pues sería como tratar de reciclar cartón junto a vidrio.
De hecho, los productos con procesos de reciclaje más complicados son aquellos que contienen varios materiales juntos. Un ejemplo de ello son los tetrabriks, que al estar compuestos de cartón, aluminio y polietileno no pueden ser reciclados al 100% porque no es posible separar todos los materiales tras su uso.
Respecto a la clasificación del plástico, existen 7 números que recogen los códigos de identificación. Su función es importante debido a que permite a toda la cadena de suministro, desde productores a consumidores, conocer de forma precisa el material empleado en el objeto plástico.
¿Deben cambiarse los hábitos de reciclaje para adecuarse a los códigos de identificación del plástico?
Pese a que la numeración de los códigos de identificación facilita la selección y separación de los diferentes tipos de plásticos, esto no afecta en absoluto al consumidor final. Este deberá seguir depositando sus residuos plásticos en el contenedor amarillo, y será la empresa de recogidas la encargada de llevarlo a una planta dónde se clasificará y comenzará el proceso de reciclaje.
Clasificación de los 7 códigos de identificación para el plástico
Número 1: PET o PETE (Polietileno tereftalato)
Es el tipo de plástico más utilizado en los envases alimentarios gracias a propiedades como su ligereza, su bajo coste de producción, así como sus grandes posibilidades de reciclaje. Lo habitual es encontrarlo en bandejas alimentarias. Al ser un material circular, el PET puede ser reciclado y volver a ser lo que era, por lo que es común encontrar en el mercado bandejas o botellas de rPET, además de otros muchos productos elaborados con este material.
A este respecto, en SP Group llevamos unos años introduciendo el material reciclado en el proceso de producción de nuestra lámina de PET para la fabricación de bandejas. Ello nos ha llevado a nuestra lámina monocapa rPET termoformable, que está compuesta de material reciclado al 100% y es 100% reciclable, procediendo más del 50% de su composición de otras bandejas recicladas posconsumo. De esta manera, conseguimos darle una segunda vida a uno de nuestros productos más demandados.
Número 2: HDPE (Polietileno de alta densidad)
Este código de identificación del plástico se usa para designar al tipo de plástico resistente a productos químicos, poco flexible, pero fácil de fabricar y de manejar. Sus usos más habituales son las bolsas de supermercado, productos de limpieza y de higiene personal, envases de leche, zumos o yogurt. Una vez reciclado puede utilizarse nuevamente para botellas de detergente, tubos, envases de aceite o incluso para muebles de jardín.
Número 3: V o PVC (Vinílicos o Cloruro de Polivinilo)
Dentro de los códigos de identificación de los plásticos, el número 3 se corresponde con materiales que destacan por tener cloro en su composición, lo que hace que su proceso de reciclaje sea más complejo. Sin embargo, cabe destacar su alta resistencia a los ácidos, así como su dureza, que permite que sea utilizado sobre todo para tubos y cañerías, botellas de detergente, equipamientos médicos, suelas para zapatos y un largo etcétera.
Número 4: LDPE (Polietileno de baja densidad)
De la familia de los polietilenos, se trata de un plástico muy flexible que es ampliamente usado por la industria alimentaria debido a sus prestaciones de sellado y a la velocidad que alcanza el envasado en máquina. Así mismo, también es frecuente encontrarlo en forma de bolsas de todo tipo, envases de laboratorio o de comida congelada. Además, tras su reciclaje se puede utilizar de nuevo en contenedores y papeleras, paneles, tuberías o baldosas.
Número 5: PP (Polipropileno)
Se trata de un material perfecto para envases microondables ya que destaca por su dureza, barrera al vapor y resistencia al calor. Ello lo hace ideal, entre otras cosas, para envases de alimentos que se esterilizan. También es habitual encontrarlo en botes de salsas, tapas y envases de uso médico y veterinario. Además, tras su proceso de reciclado, es habitual emplearlo en la elaboración de cepillos, bandejas, cables de batería o señales luminosas.
Número 6: PS (Poliestireno)
El poliestireno es un material que se usa principalmente en bandejas para alimentos, en la industria de los lácteos, para embalajes de electrodomésticos e incluso para la fabricación de vasos para bebidas calientes. Así mismo, es un material con una vida útil muy larga y que puede ser reciclado infinitas veces, lo que lo convierte en un material con propiedades bastante sostenibles. No obstante, como principal punto negativo del material, encontramos que altas temperaturas, a más de 80 °C, libera estirenos. El estireno está clasificado como un posible carcinógeno humano por la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC).
Número 7: Otros (mezcla de otros plásticos)
Dentro de los códigos de identificación para el plástico, el número 7 es aquel en el que se incluyen una gran variedad de materiales plásticos que son muy difíciles de reciclar. En muchos casos, los artículos clasificados con este número incluyen varios tipos diferentes de plástico en su composición. Aunque es habitual encontrarlos en gafas de sol o DVD, también se utiliza en algunas clases de botellas de agua o ciertos envases alimentarios.
Procesos de reciclado de los plásticos
La necesidad cada vez mayor de envases sostenibles responsables con el entorno por parte de los fabricantes hace que adquiera gran importancia el proceso de reciclado de los plásticos.
Existen diferentes tipos de procesos de reciclaje, aunque los principales son los siguientes:
- Reciclaje mecánico: es un sistema por el que se cortan las piezas de plástico en pequeños granos para tratarlos posteriormente. Se trabaja principalmente con macromoléculas de los polímeros.
- Reciclaje químico: se degradan los materiales plásticos mediante calor para conseguir nuevamente moléculas simples a partir de las cuales se pueden conseguir otros tipos de plásticos o combustibles.
- Reciclaje energético: es aquel sistema que convierte el plástico para un posterior aprovechamiento energético.
Además de conocer y saber cuáles son los códigos de identificación de los plásticos, es importante tener en cuenta la Ley de Residuos y Suelos Contaminados, que delimita las obligaciones de productores y gestores con el objetivo de conseguir una política de residuos eficaz.
En SP Group participamos en proyectos sostenibles para los residuos plásticos como es el programa Tray2tray o Retray. Si quieres saber más sobre ellos, no dudes en ponerte en contacto con nosotros o visitar nuestra página web.